La farmacia atracada se encontraba en aquellos años en una zona marginal de Portland, ahora es la zona más moderna y vanguardista de la ciudad.

El director de la película Renny Harlin, hace un cameo como un conductor que lleva a su hijo a un parque antes de una de las carreras.

Consiguió el Razzie 2002 a la peor actriz de reparto, Estella Warren, que también era candidata por su papel en ¨El planeta de los simios¨. Además, también optaba al Razzie al peor director, película, pareja cinematográfica (Reynolds y Stallone), guión, actor de reparto (Reynolds) y actor (Stallone).

El guión es del propio Stallone y surge de su admiración por el corredor brasileño Ayrton Senna, de quien quería rodar su biografía.

Sylvester Stallone quería que la coprotagonizara Leonardo DiCaprio pero el joven actor ya tenía previsto protagonizar ¨Gangs of new York¨.

Cuando el doctor corre junto al oso suenan los acordes de ¨The eye of the tiger¨ de la banda sonora de ¨Rocky¨. Esta canción ya fué mencionada en la primera parte.

En la película hay guiños a clásicos: Cuando los animales dan la espalda al oso, un cuervo dice ¨nunca más¨, parodiando un momento clave del relato de terror ¨El cuervo¨ de Edgar Allan Poe. Un cerdo encerrado en una de las celdas saluda a los protagonistas diciendo ¨Hola Clarice¨, al igual que Anthony Hopkins en ¨El silencio de los corderos¨. Casualmente, lo ha doblado el mismo actor español.

Se utilizaron treinta tigres en total, dieciocho de ellos cachorros. El mayor problema fue tener siempre disponibles cachorros de entre siete y doce semanas. Siguieron todos los nacimientos de tigres alrededor del mundo. Los zoos estaban notificados de la búsqueda y les mantenían al tanto.

Por motivos de seguridad, cada escena con animales y personas fue filmada en un pase doble: primero los tigres y después los actores, en el mismo decorado. Las tomas se componen después durante la postproducción. En muy pocas ocasiones se recurrió a los efectos especiales en 3D. También utilizaron la animatrónica.

Annaud quería evitar los inconvenientes del 35mm que había padecido en ¨El Oso¨, ya que cuando se trabaja con animales es esencial dejar rodar a la cámara durante largos periodos a fin de captar el momento mágico. Con el 35mm, volver a cargar la cámara significa unos quince minutos que a menudo son cruciales. Pensó en el vídeo digital pero estaba convencido de que la calidad no sería suficiente para una película en ¨scope¨ e hizo un experimento muy sencillo: durante dos días colocó una clásica cámara de Panavisión al lado de una cámara digital de nueva generación. Filmó a uno de los tigres de Thierry Le Portier en el recinto que tenía en Puy-du-Fou, primero a pleno sol y después en la sombra del bosque. Aunque pensó que habría diferencias de grano entre ambas tras el montaje le resultó imposible diferenciarlas. Aún así, rodaron una pocas escenas en 35mm porque las cámaras digitales no tenían cámara lenta y para captar la mirada a menudo es necesario trabajar con 120 imágenes por segundo.

El guión está escrito por el propio director en colaboración con Alain Godard, con quien trabaja desde ¨El nombre de la rosa¨. Annaud pasó hace algunos años las Navidades con su familia en Socotra, una isla yemení cerca del cuerno de �frica. Allí comenzó a escribir un cuento en el que seguía a dos jóvenes tigres e hizo que nacieran en la parte del mundo que más le había impactado: las ruinas de Angkor. Sentado al lado de la tienda, con una lámpara de aceite, frente al Indico, cada tarde llenaba dos o tres páginas de la libreta antes de dormir. Cuando regresó de las vacaciones su mujer, que trabaja con él, sugirió que hiciera una película.

Thierry Le Portier hizo una selección de su colección de animales salvajes según su capacidad para cumplir los requisitos de las escenas en el guión y compró otros por sus habilidades especiales. Hizo traer de Estados Unidos dos tigres especializados en correr. Los adiestró a todos durante un periodo de seis meses en Puy-du-Fou y de este modo llegó al rodaje con animales que ya habían ensayado.

Hay una versión cinematográfica de los años cincuenta, titulada ¨Trece por docena¨, dirigida por Walter Land y protagonizada por Clifton Webb y Mirna Loy.

Se basa en la vida real de la familia Gilbreth y en el libro para niños de Frank B. Gilbreth, el cabeza de familia, escrito en colaboración con Ernestine, una de las hijas, y publicado en los cuarenta, aunque los nombres y la historia (salvo el número de miembros) se han modificado.

Está producida por Furthur Films, la compañía del productor y actor Michael Douglas.

Se presenta como la segunda parte de ¨Dirty dancing¨ (1987), protagonizada por Patrick Swayze y Jennifer Grey, aunque la historia transcurre años antes que la de la primera entrega.

Ninguno de los protagonistas sabía bailar salsa y pasaron diez semanas en Puerto Rico entrenado ocho horas diarias con JoAnn Jansen.

Cuando se anunció el rodaje en 2000 se mencionó a Ricky Martin y Natalie Portman como posibles protagonistas.

El guión es de Boaz Yakin y la debutante Victoria Arch, y se basa en la historia real de la productora JoAnn Jansen, quien se trasladó a Cuba con su familia en 1958.

El guión es del propio David Spade, protagonista de la película, y lo escribió en colaboración con Fred Wolf. Ambos son guionistas habituales del famoso programa de la televisión estadounidense, ¨Saturday night live¨, y ya escribieron juntos ¨La sucia historia de Joe Guarro¨.

Varios ex-niños prodigios reales se interpretan a sí mismos como Corey Feldman, Rob Reiner o Leif Garrett.

Está basada en la novela de Charles R. Jackson ¨The lost weekend¨ en la que el escritor narra sus propias experiencias como alcohólico durante un largo fin de semana en Nueva York, sin dinero ni amigos.

Para preparar el papel, Ray Milland pasó una noche en la planta de alcohólicos del Hospital Bellevue de Nueva York. Impresionado, Billy Wilder pidió y obtuvo permiso del hospital para filmar la escena del ingreso de Birnam en el auténtico escenario.

Las tres bolas que aparecen junto a las casas de empeño en el film, eran el símbolo de los prestamistas en la época en que se rodó la película. Su origen está en el escudo heráldico de la Casa de Lombard, famosos prestamistas de los reyes ingleses durante la Edad Media, que mostraba tres esferas doradas. Desde entonces las tres bolas fueron el símbolo de las casas de empeño en los países angloparlantes durante siglos.

Aunque algunos exteriores se rodaron en escenarios reales de la Tercera Avenida de Nueva York, todos los interiores se filmaron en los estudios Paramount de Hollywood. En uno de ellos Billy Wilder hizo construir una réplica del interior del bar Clarke¨s, un establecimiento muy popular de la citada calle, tan exacta que hasta reproducía a los animales disecados que adornaban algunos rincones del local. De hecho varias veces se tuvo que interrumpir el rodaje cuando alguien ajeno al mismo entraba al lugar y tomándolo por un bar real, pedía una copa al actor Howard da Silva, que interpretaba al camarero Nat.